Cuando el Mundo se Hace Sordo

Me perturbas. Lo haces sin quererlo. Pero lo consigues. Eso me cautiva aún más. Tus imposibles que abrazan al verso. Tus ojos de obsidiana, negros y verdes a la par... Tan fácil se encuentran con los míos como los rechazan. Me perturbas. Preocupas mis días. Los conviertes en quebrados interminables... (Me gusta tu voz en mi oído). Es de caramelo. Me gustan tus silencios con pintados en el tacto de tus manos al aire.

A veces pienso en adaptar tu cuerpo al mío. En hacerlo uno. Duele. Me sigue perturbando. La serie de resortes que no encajan y desencajados dibujan aristas extrañas en la redondez de tu sonrisa. Me gusta cuando entre tú y yo sólo queda ese halo de sonidos. Nada más. Entonces me miras y el mundo se hace sordo.

Después posas tus ojos en otros secretos y me perturbas. Y la realidad cae sobre mí con el peso del universo.


R.


1 comentario:

  1. Es increíble el efecto que crean algunas personas. Una entrada perfecta.

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muchas gracias por comentar